Escuchando a Guardiola decir que el fútbol es "sólo un juego", me hace recordar una anécdota de otro gran filósofo del fútbol: Jorge Valdano.
Durante la transmisión de un partido de la copa del mundo de Estados Unidos, una portería tuvo que ser sustituida, y mientras decidían cómo se arreglaría el problema, Valdano dijo "Que pongan 2 suéteres", recordandonos lo sencillo y esencial que es el juego... y que el fútbol es la forma más adulta de ser niños otra vez.
Y la aseveración de Guardiola es especialmente esencial en estos tiempos en que el fútbol se ha vuelto parte de una ecuación en la que del otro lado está el negocio. Y la ecuación, con el tiempo se ha desbalanceado, y el juego del fútbol ha sido relegado a elemento sin importancia, dando prioridad a la frialdad y pragmatismo del dinero. Por eso vemos atrocidades en el juego, como las formaciones 6-3-1 del Chelsea contra el Barcelona, es más importante el premio que el juego...
Muchas veces veo a aficionados defendiendo con cierto grado de violencia a sus equipos, tratando de demostrar que no son "pecho frío" y que se "apasionan" por unos colores (aún cuando su filiación sea más por moda). Es entonces cuando me doy cuenta cuánto nos hace falta gente como Guardiola y Valdano, para recordarnos que el fútbol es eso, un juego, una experiencia lúdica en la que el de enfrente no es un enemigo, es un compañero de juego al que trataremos de vencer y ser mejor que él en el juego, y no necesariamente en la vida. Ya lo decía Valdano, "el fútbol es lo más importante de las cosas menos importantes". Por eso no logro comprender las agresiones hechas en nombre de la bandera de algún club... es un juego, como dice Guardiola.
Por eso el Barcelona de Guardiola se recordará siempre, por que dentro de la aparente sofisticación de su toque y sus jugadas, tenía siempre esa idea, esa aspiración que teníamos cuando jugabamos fútbol en la infancia, anotar goles, siempre buscar anotar, jugar bonito y ganar. Por eso era imposible no admirar a ese equipo, por que conectaba con los sentimientos y aspiraciones más profundas de todos los que nos gusta el Juego del Futbol. Era la máxima expresión del Juego, hecho por profesionales.
Habrá cínicos que dirán que igual se anotan goles al estilo inglés, con fuerza física y centros al área... Pero es como darle a pintar una pared a un pintor de brocha gorda y otra a Picasso. Ambos dejarán la pared pintada, pero la de Picasso, será eterna, así como el recuerdo de este Barcelona.
P.D. Esto fue escrito por un aficionado del Madrid desde la época de Hugo Sánchez.
